jueves, 21 de junio de 2012 - , , , , , , , , , 2 comentarios
XXII

Aquella noche miré al cielo,
seguí caminando sin más.
Se apoderaba de mí, un inmenso miedo,
y cerré los ojos para llorar.

La luna era mi único consuelo,
el sol ya dejó de brillar,
y a veces siento que muero,
cuando pienso en aquel día fatal.

Siempre pienso en cada instante,
¡No entiendo qué pudo pasar!
Ahora nada es como antes,
ya nada será nunca igual.

Las estrellas caminan por el cielo,
se marchan a otro lugar,
y yo aquí, tan solo me quedo,
soñando y volviendo a soñar.
miércoles, 6 de junio de 2012 - , , , , , , , 4 comentarios
XXI

La vida es un sueño intranquilo,
que se me escapa de las manos por momentos.
Siempre he pensado que era el destino,
pero eso murió hace ya mucho tiempo.

Mientras pueda, seguiré gritando,
esa es la única y cierta verdad.
Hasta entonces, seguiré amando,
la luz se apagará tras el cristal.
martes, 5 de junio de 2012 - , , , , , , , , , , , 2 comentarios
XX

Déjame morir en paz,
ahora que todo es incierto.
Déjame por fin soñar,
ahora que tú ya te has muerto.

Si te dicen que me fui,
no quiero que llores por ello,
tampoco quiero verte sufrir,
sólo quiero que mires al cielo.

Es difícil poder entender,
por qué a veces negamos lo cierto,
y no quiero volver a creer,
no quiero vivir con el miedo.
lunes, 4 de junio de 2012 - , , , , , , , , , 4 comentarios
XIX

Hoy soñé que me mirabas,
como Dios al crear el Edén.
Hoy soñé que me dejabas,
Como Caín al matar a Abel.

También soñé que me olvidabas,
como un hombre que pierde la fe,
no sé bien por qué lloraba,
no tenía razón de ser.

Todo aquello me rompió el alma,
¡maldito seas, déjala ser!
No volví a creer en nada,
simplemente, desperté.
viernes, 1 de junio de 2012 - , , , , , , , , , , , , , 0 comentarios
XVIII

Allí estabas tú sentada,
sola y "muerta" de frío,
y oculta tras tu mirada, 
la tristeza del destino.

Ahora nada tiene sentido,
nada puedo ya entender,
y de rodillas te lo pido:
Nunca dejes de creer.

Déjame soñar contigo,
quiero ver lo que tú ves.
Muy en serio te lo digo,
nada puedo ya perder.

Desviaron tu destino,
no pudiste decir que no.
Te perdiste en el camino,
de la vida y la pasión.

Todo carece de sentido,
no pude decirte adiós.
Volveré a gritar contigo,
no lo olvides, tú y yo.

¿Volveré yo a ser el mismo
después de lo que pasó?
O me iré a morir contigo,
no encuentro otra solución.